miércoles, 28 de julio de 2010

América latina no ve la “I” en BRIC

No es un problema de una economía latinoamericana puntual, sino un número que engloba un desconocimiento comercial que si no se resuelve será una condena para el desarrollo económico de la región: sólo el 0,9% de las exportaciones de América latina van a la India.

Es cierto, el apetito chino por las commodities agrícolas e industriales (cereales, oleaginosas y minerales) lejos está de saciarse –hacia allí van el 3,8% de las ventas externas latinoamericanas-, que ya aparece otro mercado de condiciones similares, sobre todo, de hambre de materias primas.

Pero mientras China sigue siendo la sensación, América latina todavía no puso el ojo en la “I” del BRIC, sigla ideada por el banco de inversión Goldman Sachs para referirse a cuatro economías (Brasil, Rusia, India y China) que comparten un gran tamaño, una economía emergente y un futuro llamado al desarrollo como potencias comerciales hacia 2050, o antes.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) indicó recientemente que India cuenta con todas las demandas típicas para movilizar la economía latinoamericana, que básicamente reside en su mercado de 1100 millones de habitantes.

A diferencia de China, India es una democracia, la más grande del mundo. Esto pudo, en algún momento, demorar las reformas clave para hacer valer todo su peso en la balanza mundial. Pero India hizo su proceso de apertura en los 90, 20 años más tarde que China. Y ahora cosecha.

Según el BID, India todavía no está en el radar latinoamericano en un siglo llamado a ser “el de Asia”, en el que América latina no puede darse el lujo de ser el gran ausente.

A diferencia de lo que sucede China, con India no existen servicios marítimos directos, lo que encarece el comercio bilateral y los tiempos de tránsito. “Una reducción en los fletes del 10% impulsaría las importaciones desde India en el orden del 46 y 47 por ciento para Chile y la Argentina, respectivamente”, destacó el BID.

Pero es tarea de los gobiernos iniciar el cortejo correspondiente, porque se trata de un intercambio bilateral (entre India y la región) sensiblemente “arancelado”: las manufacturas de origen agroalimentario latinoamericanas enfrentan aranceles en India de un 65% como mínimo, más de cinco veces de los 12,5% promedio que tiene China.

Cabe aclarar que, con motivo del conflicto que mantiene la Argentina con China que devino en un cese de los embarques argentinos de aceite de soja (es el principal exportador mundial del producto que, a su vez, es el principal producto de exportación nacional), la India se transformó en el primer comprador internacional del aceite de soja argentino.

Sólo la Argentina, y sin contar los otros países de la región, tiene una capacidad productora de alimentos con potencial para alimentar 400 millones de habitantes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario